5 Febrero - 4 Abril
¿Dónde has estado todo este tiempo?
Una individual de Agnieszka Polska¿Dónde has estado todo este tiempo? | Where have you been so long? es el título del episodio expositivo, comisariado por This is Jackalope, que inaugura el ciclo Un rastro involuntario. La muestra está firmada por la artista polaca residente en Berlín Agnieszka Polska y reúne dos ensayos audiovisuales. Sus trabajos de animación creados por ordenador se basan en el uso del lenguaje, la historia y la teoría científica para alumbrar cuestiones de responsabilidad individual y social en la era actual.
¿Dónde has estado todo este tiempo? | Where have you been so long? es el título del episodio expositivo, comisariado por This is Jackalope, que inaugura el ciclo Un rastro involuntario. La muestra está firmada por la artista polaca residente en Berlín Agnieszka Polska y reúne dos ensayos audiovisuales. Sus trabajos de animación creados por ordenador se basan en el uso del lenguaje, la historia y la teoría científica para alumbrar cuestiones de responsabilidad individual y social en la era actual.
En sus trabajos, Agnieszka Polska combina textos poéticos originales con imágenes manipuladas digitalmente para explorar las abrumadoras ambigüedades éticas de nuestro tiempo.El primero de los ensayos que compone la muestra es El pensamiento más feliz | The Happiest Thought (2019), una vídeo-instalación inmersiva. Una propuesta visual de carácter alucinatorio y poético, en la que la artista revive la biosfera prehistórica antes de la mayor extinción de especies en la historia de la Tierra. Un inquietante fenómeno natural que estudios recientes achacan en parte a un cambio climático, supuestamente debido al aumento de actividad de los volcanes en la actual Siberia, lo que provocó una reacción de altas temperaturas. Un proceso que se desarrolló a lo largo de muchos miles de años y que actúa como posible reflejo de la situación actual. Entonces, y previsiblemente en un futuro no muy lejano, la tierra se volvió/volverá prácticamente estéril.Este punto de partida histórico se entrelaza en la obra, a su vez, con un guiño al pensamiento más feliz del físico Albert Einstein, lo que más tarde llamó el pensamiento fundamental, que inspiró la formulación de su teoría general de la relatividad en 1915, la cual entiende el espacio y el tiempo como entidades dinámicas.Ese pensamiento feliz es visualizado con la escena que abre esta pieza: un trabajador cayendo de un tejado donde está trabajando y ese ambiguo momento en el que no sabe identificar a nivel perceptivo si está en caída libre o se encuentra flotando en el espacio. Esta sensación de pérdida de equilibrio y desorientación placentera aspira a que modifiquemos la perspectiva de visualización, a perder el centro de amarre a nuestra realidad y con ello a vernos como parte de un todo y con todos los sentidos.La pieza aspira, así, a afectar la fisicalidad del espectador y con ello sus emociones. A diferencia de la experiencia de visualización de las gafas de realidad virtual, ésta es una experiencia compartida. Una herramienta física y poética con la que poder orientarnos en la asfixia y caos general contemporánea (según Franco Berardi, Bifo).La pieza se acompaña con una selección musical que combina extractos de bibliotecas digitales de música épica y dramática, otras compuestas específicamente para la obra y se entrelaza con momentos interpretados al estilo gospel por el artista de performance Geo Wyeth.
La otra pieza se titula El nuevo sol | The New Sun y plantea una narrativa protagonizada por un sol, testigo del colapso ambiental y ético en la Tierra. El punto de partida fue el poema de una poetisa polaca del siglo XIX Maria Konopnicka, que describió las armoniosas rutinas diarias de la modesta vida rural como si fuera vista desde arriba por el sol.Polska se centró en la figura de un testigo distante pero diligente en sus observaciones, prisionero de los acontecimientos que se desarrollan ante sus ojos, incapaz de apartarse o de tomar cualquier medida ante la miseria y el sufrimiento que está presenciando. En su monólogo, el sol se mueve delirantemente a través de varios estilos musicales y estados emocionales: a veces excitado, ansioso, nervioso y, por encima de todo, enamorado.Los temas que aquí aborda están ligados a las políticas post-identitarias; su atención se centra en la humanidad como un todo colectivo que se encuentra bajo la mirada de un sol empático y afectuoso. El sol habla directamente a la audiencia en monólogos que manejan diversos estados emocionales y modos de narrar, profesando a veces amor y otras contando chistes absurdos, todo ello para reflexionar sobre el poder del lenguaje para construir un nuevo orden mundial.Los pasajes del texto se refieren al efecto en la mecánica cuántica en el que el observador influye en el evento observado a través del acto de interpretarlo. Desde este punto de vista, se ve que el personaje del sol es testigo indefenso y causa de la transformación que contempla. Al incorporar tácticas de manipulación suave de los vídeos online como son la mímica emocional y los desencadenantes ASMR (sonidos intensos y susurros que estimulan sensaciones agradables de hormigueo en aquel que lo escucha), Polska crea una atmósfera fascinante generando un paralelismo competente con lo que ella llama el “ambiente de seducción” que rodea el marketing de consumo y la religión organizada en el que estamos inmersos.Polska describe el lenguaje como un código que construye tanto el cuerpo físico como su representación en el mundo virtual. Y es que la materialización del lenguaje es tratada por ella como la onda de presión del sonido que se mueve a través del aire hasta la creencia espiritual de que nombrar es un acto de creación.A través de sus trabajos audiovisuales narrativos, Agnieszka Polska aspira a crear un espacio común de intercambio, un lugar donde se pueda dar la participación en el ritual, en el que juntas podamos enfrentar nuestra calamidad colectiva. Sus trabajos se plantean como intentos de comprender la realidad que nos rodea, abrazar sus ambigüedades, a la vez que explorarlas desde la oralidad y lo visual.
Agnieszka Polska (1985, Lublin, Polonia) vive y trabaja en Berlín. Ha mostrado sus trabajos en espacios internacionales, tales como el New Museum y el Museum of Modern Art en Nueva York, el Centre Pompidou y el Palais de Tokyo en París, Tate Modern en Londres, el Museo Hirshhorn en Washington, DC y Hamburger Bahnhof, en Berlín. Polska también participó en la 57ª Bienal de Venecia, la 11ª Bienal de Gwangju, la 19ª Bienal de Sydney y la 13ª Bienal de Estambul. En 2018 fue galardonada con la Preis der Nationalgalerie de Alemania.* El pensamiento más feliz | The Happiest Thought forma parte del programa El nuevo infinito | The New Infinity, coproducido con Berliner Festspiele / Immersion y Hamburg Planetarium.
Todas las fotos @Bego Solis + La Casa Encendida 2021